A través del espejo.
—Sabes que no lo puedes hacer sin mí. — Dijo el ser del espejo. Habló con voz severa, potente y decidida. Era estridente, como el rugido de un león.
Phillips se encontraba ensimismado, balbuceando más para sí que respondiendo a la orden. — Permitidme salir, amo. Os prometo que solucionare todo aquello que lo aqueja. Seré y estaré a sus pies por la eternidad. Tanto en este plano, como el otro.
Philips no responde, sólo camina en dirección al espejo; al portal dimensional desde el cual, aquel ser lo hipnotiza. No nota los temblores que arremete contra la mansión, tampoco es consciente del líquido que escapa del espejo, como empieza a desintegrar la madera al hacer contacto. Él está vacío, vé su cuerpo parado frente al espejo y como aquella cosa se mete por su naríz. Para cuándo logra entender lo que sucede, se encuentra detrás del espejo, en una tierra extraña, ajena a todo lo que pudiera imaginar.
Muy buen relato, corto pero muy interesante, se complementa con el otro relato del espejo.
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